El papagayo que brotó de la pena
tuvo plumas rojas del fuego
y plumas azules del cielo
y plumas verdes de las hojas del árbol
y un pico duro de piedra y dorado de naranja
y tuvo palabras humanas para decir
y agua de lágrimas para beber y refrescarse
y tuvo una ventana abierta para escaparse
y voló en la ráfaga del viento.
Galeano, Eduardo. Historia de la resurreción del papagayo. Barcelona : Libros del Zorro Rojo, 2008.
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