¿Por qué Málaga?
Ella le había dicho que su marido tuvo que dejar la ciudad por unos días en viaje de negocios. Él se había acordado al ver una promoción de Málaga, que le recordaba el tiempo maravilloso que había tenido allí anteriormente. ¿Por qué no nos vamos a Málaga? había sugerido a ella.
Viéndola durmiendo tranquilamente en su hombro, se dio cuenta a que punto había llegado su relación. ¡Cómo la quiere! ¡Qué no haría él por ella! Llegarían a Málaga en una hora. Los auxiliares de vuelo habían recogido las sobras de la comida. ¿Sería capaz de convencerla de dejar a su marido por él? Él estuvo seguro que iba a hacer todo lo posible.
Málaga le recordaba a la película ‘Casablanca’ siempre. No sabía por qué. La traería a visitar a la Alcazaba y al Castillo de Gibralfaro. También visitarían el Teatro Romano que había sido promovido por el emperador César Agostos. Ellos saborearían la influencia árabe y romana en Málaga y disfrutarían las vistas de la Ciudad Genial y de su puerto.
Le encanta tanto el arte. La llevaría a la casa donde nació Picasso en 1881 y al Museo Picasso. Le encantaría mostrarle la famosa catedral de Málaga también pero se preguntaba si tal visita la haría sentir culpable por estar con él.
Podrían cenar cada noche en un restaurante por la calle Marqués de Larios o por la Plaza Constitución. Cuánto le gusta a ella salir a cenar. ¡Qué lástima que el clima en Irlanda no sea como en Málaga! Dejaría a Málaga seducirla para él.
Las puertas del ascensor se abrieron de repente. La última persona que salió fue su marido. Era difícil saber quién tenía la cara más roja, ella o su marido. ¿Cómo no supo ella que su marido estuviera en Málaga también? Antes de que pudiera pensar qué hacer, oyó una voz estridente, pero conocida, gritando el nombre del mismo marido desde el vestíbulo del hotel. “Estoy aquí, cariño”, dijo.
Dándose la vuelta y descubriendo que la voz conocida vino de su propia mujer infeliz, recordó las líneas dichas por el personaje Rick que fue interpretado por Humphrey Bogart en Casablanca y pensó para sí mismo: ¡de todas las ciudades en todo el mundo, mi mujer tuvo que venir a la mía! ¿Por qué Málaga? ¿Por qué Málaga?
Cathal Ahern
¡Enhorabuena a todos los participantes!