Nueva narrativa: Nocilla dream de Agustín Fernández Mallo. Miércoles, 13 de noviembre, de 19 a 21 h.
Decía Aristóteles en su libro de las “Categorías” que el ser se dice de muchas maneras. Y salvando las largas distancias con el filósofo griego, lo mismo podríamos afirmar de la literatura española actual: la nueva narrativa se escribe de muchas maneras. Así sucede con la obra que nos tiene convocados como lectores en nuestro Club: “Nocilla Dream”, de Agustín Fernández Mallo.
La apuesta experimental del escritor gallego trata de diseccionar la realidad posmoderna en la que supuestamente habitamos basándose en la noción de ‘rizoma’, tomada de los filósofos Felix Guattari y Gilles Deleuze. El rizoma de Fernández Mallo es una línea que atraviesa perpendicular, transversal o aleatoriamente personajes, temas, situaciones, citas literarias, tipos de lenguaje, movimientos artísticos, nociones científicas, letras de canciones, cotidianeidad,…, que se van llamando unas a otras de forma aparentemente inconexa pero que van sumiendo al lector en un “arroyo sin comienzo ni fin”, en lo que Juan Bonilla, prologuista de la obra, llama “zapping literario”. Y en este caudal de agua del que aparentemente no se puede salir van apareciendo rubias de burdel, ácratas que habitan en extrañas micro naciones, ancianos chinos adictos al surf, un ex boxeador de San Francisco que quiere invertir la ruta de Colón a pie, un argentino que vive en un apartahotel de Las Vegas y construye un singular monumento a Jorge Luis Borges… Y todos ellos atrapados en la metáfora conductora de los desiertos: un árbol en el desierto de Nevada del que cuelgan centenares de zapatos, un gasolinero en el desierto de Albacete que compone canciones marginales entre los surtidores, y siempre la belleza del vacío.
“Nocilla Dream” fue la primera prueba del Proyecto Nocilla, a la que seguirían “Nocilla Experience” y “Nocilla Lab”, y quizás también para algunos “El hacedor (de Borges). Remake”, obra esta última que, sin embargo, fue sometida a la censura inculta. En definitiva, un experimento literario que nos recordará el imaginario de las películas de David Lynch o Quentin Tarantino, o el de los libros de David Foster Wallace, siendo quizás el referente más preciso el libro sobre París del filósofo Walter Benjamin, aunque, eso sí, envueltos en ese producto tan español, la nocilla, una especie de masa de chocolate dulce y espesa, a la que el grupo musical Siniestro Total homenajeó en su canción “Nocilla, qué merendilla”, origen del título de esta invención del laboratorio Fernández Mallo. Quizás, el resultado sea algo tan frágil, tan poca cosa, tan posmoderno, como lo que Juan Bonilla afirma en el prólogo del libro: “La capacidad de encontrar plenitud y belleza en realidades que suelen pasar desapercibidas […]”.
Precio de la sesión: 10 euros. A pagar en la secretaría de nuestro centro en el momento de la inscripción; o inscríbase a través de Internet en este enlace