«[…] primero fue el hambre. Primero fue la ignorancia. Primero fue la endogamia. Y la agonía de saber que entre el mar y los volcanes no había nada que no perteneciese en primer o último término a las contadas familias a quienes había pertenecido desde siempre todo aquello que sirviese para vivir o buscarse la vida. Primero fue la ignominia. Y el privilegio y el oprobio y la ira contenida en los ojos de hombres que no se atrevían a alzar la vista al paso de los lujanes, los sotomayores, los sotoseñores, los escrotomejores; los ojos de hombres cuyas manos labradas hubiesen podido romper cabezas y abrir gargantas, pero hubieron de tragar los sapos de la desigualdad en la tierra más fértil donde ya todo tenía dueño salvo la miseria. Y esta sí, la miseria, esta sí fue repartida a todos los que no llevaran galones o alzacuellos o cédulas con tres apellidos. Y, después de repartida la miseria, aún sobró. Siempre hubo miseria para repartir, porque la esperanza sí, pero la miseria nunca se acaba».
(Los milagros prohibidos, p. 159)
“Me lanzo esta vez con un comienzo de entrada, que no de novela, un poco largo, […]. Era todo o nada y he querido dejar entero testimonio de la maestría literaria y de la posición ante la vida, que comparto totalmente, de Alexis Ravelo.” (Rosa Berros Canuria, 25 de mayo de 2020: https://elblogdelafabula.blogspot.com/2020/05/los-milagros-prohibidos-alexis-ravelo.html)
Recordando esa actitud ante la vida leemos hoy Los milagros prohibidos de Alexis Ravelo, aunque “Dadas las circunstancias, para que […] estuviese bien, sano y salvo, habría hecho falta un milagro. Y los fascistas habían prohibido los milagros” (p. 90 de la edición de Siruela).
Una novela que, en palabras de su autor, es la historia de la caza de un hombre, Agustín Santos, el protagonista del triángulo amoroso que forma junto a Emilia Medeiros, su esposa, y Floro el Hurón, un falangista celoso. Pero el proyecto es ambicioso, busca la implicación del lector ampliando el punto de vista local. Ravelo confiesa: “he querido hacer algo parecido a lo que escribió Graham Greene en El poder y la gloria o Margarite de Yourcernar en El tiro de gracia, una historia que partiendo de lo más pequeño, sencillo y particular creciese hacia lo universal” (entrevista de Javier Vasco Oliaga para «Todoliteratura.com», 3 de marzo de 2017). El momento de la acción se sitúa en el inicio de la guerra civil española en la isla canaria de La Palma, entre el 18 y el 25 de julio de 1936, en lo que se conocería como la Semana Roja, pero mejor que todo esto nos lo cuente el propio escritor:
Después de esta presentación, ¿quién no querría leer esta novela?
“La novela de Ravelo es un maravilloso texto en el que se expresa, con una narración de ritmo frenético, todos los componentes, circunstancias e incurias del momento, pero también es una novela que reflexiona sobre el ser humano, sobre la envidia, los celos, la ira, la irracionalidad. Un maestro huye de un falangista que le persigue por el paisaje palmero, de escabrosas montañas, frondosos bosques tropicales, ríos entre precipicios rocosos, en una suerte que no deja a nadie indiferente. Una joya apasionante.”
Lectoras, amantes y seguidores de nuestro 4L/4C, disfrutad de un libro en el que vais a encontrar aventuras, amor, deseo, política, historia, amistad, odio, celos, violencia, todos los ingredientes de la épica contados desde la autenticidad de un escritor grande, humilde y honesto. Ojalá Ravelo seas.
Comentarios recientes / Son yapılan yorumlar