Por Neri Arjona De Santiago, profesora
En la columna de este mes quiero comentar con ustedes dos películas que he visto recientemente. Se trata de las comedias Nosotros los Nobles y From Prada to Nada. Las dos tienen como tema central el exceso de mimos, privilegios y dinero que los padres mexicanos con posibles dan a sus hijos, hasta el grado tal de convertirlos en unos perfectos parásitos.
¿Qué pasa, sin embargo, cuando por causas del destino se pierde ese nivel de vida y los hijos no están preparados para hacer frente a esos reveses? ¿Es posible enseñar a los vástagos a vivir con menos y a ser más felices? Son algunas interrogantes que le surgen al espectador mientras que ve ambas comedias.
Nosotros los Nobles cuenta la historia de un padre viudo con tres hijos. Como una forma de compensarlos por la muerte de su madre, económicamente les da todo. Un día tiene que ser hospitalizado y se da cuenta de que sus hijos se han convertido en unos seres superficiales a los que nunca les ha enseñado el valor del trabajo. A partir de ahí toma la decisión de hacerles creer que se encuentran en la bancarrota y que han perdido su estatus y su dinero. Los lleva a vivir a una zona pobre y los obliga a trabajar para subsistir cada día. El inicio de su nueva vida es muy duro. Sin embargo, poco a poco van descubriendo la satisfacción de ganar su propio dinero y la enseñanza de que también se puede ser feliz con menos.
Título original de la película: Nosotros los Nobles
País: México
Reparto: Gonzalo Vega, Karla Souza, Luis Gerardo Méndez, Juan Pablo Gil
Director: Gaz Alazraki
Guion Gary Alazraki, Adrián Zurita
Género: Comedia
Año: 2013
Duración: 100 minutos
Idioma: español
From Prada to Nada relata la vida de un padre viudo con dos hijas. Una de ellas es bastante sensata, pero la otra es una niña mimada. El día en que él celebra sus 55 años de vida muere de forma súbita. Las hijas no sabían que su padre tenía suficientes deudas como para perder la casa donde vivían en Beverly Hills, los coches que tenían, en fin, todo. A raíz de esto tienen que trasladarse a vivir con la hermana pobre del padre al barrio mexicano de los Ángeles. Ahí logran un acercamiento con sus raíces, de las que, como inmigrantes de la segunda generación, se habían alejado y hasta cierto punto, avergonzado. En este nuevo destino, que en sus inicios es de todo menos placentero, recibirán satisfacciones y encontrarán, incluso, el amor.
Título original de la película: From Prada to Nada
País: México y Estados Unidos
Reparto: Camilla Belle, Alexa Vega, Wilmer Valderrama, Nicholas D’Agosto, Kuno Becker, Adriana Barraza
Director: Ángel Gracia
Guion Luis Alfaro, Craig Fernández, Fina Torres.
Género: Comedia
Año: 2011
Duración: 107 minutos
Idioma: inglés, con algunas frases en español
Y bueno, no quiero contarles más, mejor véanlas. Se pasarán un rato agradable y se quedarán con la moraleja.
¡Que las disfruten!
Por Guillermo Briz, profesor de español y traductor oficial.
¿Problema? ¿Cuál problema?
¿Es correcto el título de este artículo?
Cuándo usar “qué” y cuándo usar “cuál” suele ser un problema para nuestros alumnos, ya que estas partículas interrogativas no tienen un equivalente fijo en otros idiomas como el inglés o el holandés.
La teoría sobre “qué” y “cuál» en dos palabras, es esta:
− Uso como pronombre:
1) Usamos “qué + verbo” (Dime qué quieres / ¿Qué le compramos?) para preguntar sin restricciones por una entidad.
2) Usamos “cuál + verbo” (Dime cuál quieres / ¿Cuál le compramos?) para preguntar por una entidad que pertenece a un conjunto implícita o explícitamente prefijado.
− Uso como determinante:
3) Usamos “qué + sustantivo” (Dime qué camisa quieres / ¿Qué regalo le compramos?) para preguntar por una entidad del tipo que se menciona.
4) No se usa “cuál + sustantivo”.
En muchos manuales de español se pasa de puntillas sobre el punto 4), pero en varias gramáticas se proscribe expresamente este uso; por ejemplo:
− Gramática Básica del Estudiante de Español (varios autores, ed. Difusión)
Podemos usar qué junto a un sustantivo (¿Qué médico…? ¿Qué chica…?) pero no podemos usar cuál junto a un sustantivo (¿Cuál médico…? ¿Cuál chica…?)
− Gramática Comunicativa del español (Matte Bon, ed. Edelsa):
… cuál/cuáles en español actual no va nunca seguido de un sustantivo.
− Grammatica in gebruik – Spaans (ed. Intertaal):
Cuál/cuáles (welke?) kan alleen vóór een werkwoord staan en geeft een keuze tussen dingen aan.
Y sin embargo, la Real Academia aclara en la Nueva Gramática de la Lengua Española:
El interrogativo cuál se usa como determinante y como pronombre, aunque en el primer caso compite en desventaja con qué en algunos países [concretamente en España y en el área rioplatense]
La RAE utiliza varios ejemplos de frases perfectamente correctas de tipo 4), tanto en la Nueva Gramática como en el Diccionario de Dudas:
No te apures tanto, dinos qué pasó en la Cámara — ¿Cuál cámara?
Oyó hablar a las primas con naturalidad de cuáles parejas de la familia seguían haciendo el amor.
Queremos ver a la muchacha. — ¿Cuál muchacha?
Sabía de cuál imbécil me estaba hablando.
En resumen: el título del artículo es intachable, y el hecho de considerarlo incorrecto tiene que ver más con esta visión hispanocéntrica de nuestra lengua que, afortunadamente, vamos superando poco a poco.
Me complace anunciar que hoy inauguramos un nuevo apartado sobre México. Nuestra profesora Neri Arjona De Santiago escribirá puntualmente una columna sobre México. Neri es mexicana y trabaja como profesora colaboradora del Instituto Cervantes de Utrecht desde el año 2006, impartiendo principalmente clases de español en La Haya.
Con 116 millones de personas, México es el país con el mayor número de hispanohablantes. México es un país lleno de historia, cultura, hermosos paisajes, lugares turísticos, rica comida… y mucho más. Neri ha titulado esta columna Descubriendo México. La idea es publicar cada mes algo sobre literatura, música, pintura, cine, cocina, tradiciones, mexicanos famosos, etc. con el fin de que vayan conociendo cada vez más un poquito sobre México.
Dada la cercanía de la Celebración del Día de Muertos en México, esta primera columna tratará sobre este tema.
¡Esperamos que les guste!
Por Neri Arjona De Santiago
Entre las tradiciones más antiguas y hermosas de los pueblos autóctonos del continente americano se encuentra la festividad del Día de Muertos. Para esos pueblos la muerte no era algo negativo. La muerte marcaba el fin de una etapa, pero también el principio de otra. Encontraban en ella el ciclo vital de la propia naturaleza.
En México, las ceremonias para la celebración de los muertos tienen lugar los días 1 y 2 de noviembre. La presencia de la muerte y de los familiares difuntos ocupan la vida y el sentir de los mexicanos todos los años en esas fechas.
En las ceremonias que se realizan se presentan dos aspectos importantes: el altar con las ofrendas, que se prepara la noche del día 1, o unos días antes, y la visita a los cementerios del día 2.
En los altares de los hogares se colocan los alimentos y bebidas preferidos por los difuntos, fotografías de ellos, pan de muerto, flores de cempasúchitl, veladoras encendidas, papel picado, etc.
Según la tradición, las almas de los difuntos vuelven esa noche para visitar a los familiares vivos.
En los panteones, las tumbas se adornan con veladoras, coronas o cruces de flores; los vivos acompañan toda la noche a sus difuntos entre rezos y cánticos.
Después, los vivos comen, junto con las almas de los muertos, lo que se ha puesto en los altares.
En este enlace podrás ver un hermoso vídeo sobre la celebración del Día de Muertos en Pátzcuaro, Michoacán, México. http://www.youtube.com/watch?v=39L_Azb7GeU
En esos días, los familiares y amigos se regalan calaveritas de dulce, hechas de azúcar y con el nombre de la persona a la que se le dan.
También se acostumbra a publicar en los medios de comunicación “calaveras literarias” a personajes públicos conocidos que aún viven, pero que se les presenta ahora como muertos; por ello siempre se escriben en pasado. Con ironía, se usan sus rasgos de carácter más representativos o frases relacionadas con su trabajo o con algún hecho que los ha hecho conocidos. Las calaveras literarias siempre se escriben en verso.
Aquí les presento dos “calaveras literarias” que hice para algunos de mis alumnos. La primera es para una guía de turistas que trabaja en Keukenhof. La segunda es para una psicóloga inglesa.
Entre millones de flores
a los turistas servía,
mientras regalos recibía
de muchos bellos colores.
Especialista en turismo
hasta vivió en Turquía,
Pero la muerte, dijo, ahora mismo
necesito a una buena guía.
En la escuela de hotelería
esta inglesa que siempre estudiaba
a vencer a la apatía
a los estudiantes les ayudaba.
La muerte un día le llegó
cuando leía a Bucay
y ella tanto se asustó
que sólo pudo decir ¡ay!
Para leer las “calaveras literarias” de algunos famosos, consulta este enlace http://www.etcetera.com.mx/articulo.php?articulo=2046
Si quieres conocer la opinión del escritor Octavio Paz, sobre los mexicanos y su relación con la muerte, lee el capítulo III. «Todos santos, día de muertos», de su libro El laberinto de la soledad.
El Día de Muertos en México es una fiesta para vivos y difuntos en donde el mexicano convive de manera amistosa y cordial con la muerte. ¡Es una bella tradición que debe conservarse viva!
Y con esta “calavera”, me despido de esta columna.
Los lectores del blog,
emocionados se decían entre sí
ahora sí que la leí,
esa nueva columna,
lo que ellos no sabían
era que con tanto frenesí,
se iban a ir muy pronto a la tumba.
Entrevista realizada por Mar Juárez. Traducción Erik Coenen.
El traductor y profesor de literatura española de origen holandés, Erik Coenen, presentará el próximo jueves 24 de octubre la traducción al neerlandés de La Fábula de Polifemo y Galatea, del poeta y dramaturgo español Luís de Góngora, en el Instituto Cervantes de Utrecht. Coenen ha sido profesor de literatura española en la Universidad de Nimega y actualmente enseña teoría literaria en la Universidad Complutense de Madrid. Es autor de varios manuales de historia de la literatura española; de ediciones críticas de obras de Pedro Calderón de la Barca (Amar después de la muerte, A secreto agravio, secreta venganza, La selva confusa) y de traducciones al neerlandés de autores como Cervantes, Calderón, Quevedo, Antonio Machado, Unamuno, Borges y Muñoz Molina.
Dada su experiencia como docente y autor de obras relacionadas con la historia de la literatura española, ¿qué aspectos destacaría como los más interesantes de estos estudios?
R: De mis propios estudios en particular, destacaría la recuperación de La selva confusa, que es la primera comedia fechable de Calderón, que se conservaba en un manuscrito autógrafo pero que no había sido editado. Faltaba en todas las ediciones de comedias de Calderón. Si me está preguntando en general por el valor de los estudios en historia literaria, diría que no hay fenómeno -social, económico, político, cultural, artístico- que se pueda entender en profundidad fuera de su evolución histórica. La literatura en lengua española posee, además, una serie de textos y hasta géneros enteros de valor universal, que trascienden su momento histórico. Pienso, no sólo en el Quijote, sino en La Celestina, la novela picaresca, el teatro del Siglo de Oro de Lope y Calderón, unos cuantos poemas de Fray Luis de León, o la poesía de Quevedo y de Góngora.
¿Qué retos han supuesto para usted las traducciones de textos de grandes autores tales como Cervantes, Quevedo o Machado?
R: Me he dedicado sobre todo a la traducción de Calderón. En el caso de La vida es sueño, puedo decir que dediqué varias décadas en conseguir una versión aceptable según mi propio criterio. El mayor reto en la traducción de textos en verso no es siquiera el encontrar rimas, sino, primero, que esas rimas no resulten rebuscadas, forzadas, y el conseguir un resultado que satisfaga como poesía; y segundo, que siga sonando como la voz del autor. Esto último significa estudiar muy bien su estilo, sus giros, su léxico y hasta su visión del mundo para intentar no traicionarle. Espero haber conseguido que, digamos, mis traducciones de la poesía de Borges no suenan igual que las de Góngora. Con todo, hay que reconocer que es irremediablemente anacrónico pretender reescribir a Quevedo o Calderón en el holandés del Siglo XX o XXI, pues con los siglos no sólo cambia el idioma, sino también los conceptos. Cambia la manera de pensar que queda plasmado en el idioma. Lucho siempre con este problema y no consigo resolverlo. Me planteo algo así como esta pregunta: «¿cómo diría esto el autor, cómo redactaría este cuarteto, si, en vez de expresarse en el castellano del Siglo XVII se expresara en el holandés de mi tiempo?», pero claro, si Góngora naciera en el polder en nuestro tiempo, no escribiría como escribía un cordobés del suyo. Cualquier escritor compone con sus experiencias vitales, que están vinculadas con su época y se expresan a través de un lenguaje peculiar a esa época. De allí que existe en el fondo de estas traducciones, como he dicho, un anacronismo sin solución. En cuanto a Machado: poetas como él, o Jorge Manrique, o Fray Luis de León, son especialmente difíciles de traducir por la aparente sencillez de su expresión, que no permite apenas hipérbatos o circunloquios en la traducción. En ese sentido, Góngora o Calderón dan más libertad al traductor. Finalmente, menciona usted a Cervantes; el haber traducido algo suyo queda bien en mi currículum, pero realmente sólo traduje El retablo de las maravillas, con cuyo estilo me sentí, francamente, incómodo; demasiadas cosas parecen arbitrarias en el texto. Para empezar, los extraños nombres de los personajes, que no se podían ni dejar ni traducir. Nunca me acabó de satisfacer aquella traducción.
En relación a la conferencia del próximo jueves, ¿cuáles han sido las razones que le han llevado a traducir La Fábula de Polifemo y Galatea?
R: Hay una razón muy egoísta: era una oportunidad para leer a fondo el Polifemo. Pero también creo que tenía razón Dámaso Alonso, que es un poema de extraordinaria perfección formal, y por tanto, un regalo a la literatura universal que merece ser compartido con quienes no sepan leer español lo suficiente para disfrutar el original. Y ahora, después de traducirlo, me parece aún mejor que antes: al lado del Polifemo, las octavas de cualquier otro poeta resultan flojas y faltas de densidad. Creo que el texto merece ser traducido, y como otros que lo sabrían hacer mejor que yo no lo hacen, me propuse hacerlo yo.
¿Qué interés puede despertar este poema de Luís de Góngora en el lector neerlandés?
R: Espero que disfrutar de la buena literatura. Aparte de la mera curiosidad. Vamos, los mismos motivos que le llevarían a leer la Eneida o la Divina comedia. Pero no me corresponde a mí contestar a la pregunta; que lo digan los lectores. A Guus Middag, que reseñó el libro para NRC Handelsblad, le gustó menos el Polifemo que un soneto contra el matrimonio que incluí en la antología…
¿A qué público está dirigida su conferencia?
R: La conferencia la imparto en holandés porque, a fin de cuentas, presento una traducción al holandés. Espero que vayan traductores, porque de eso voy a hablar en parte, pero también cualquier persona que quiera pasar un rato disfrutando de la buena poesía. Es ese el público que he tenido en mente al preparar la conferencia.
Vertaler en docent Spaanse Literatuur Erik Coenen presenteert donderdag 24 oktober in Instituto Cervantes zijn Nederlandse vertaling van La Fábula de Polifemo y Galatea van de Spaanse dichter en toneelschrijver Luís de Góngora. Coenen was docent Spaanse letterkunde aan de Universiteit van Nijmegen en doceert tegenwoordig Literatuurwetenschap aan de Complutense Universiteit van Madrid. Hij is tevens auteur van diverse handboeken over de Spaanse literatuurgeschiedenis, van kritische edities van werken van toneelschrijver Pedro Calderón de la Barca (Amar después de la muerte, A secreto agravio, secreta venganza, La selva confusa) en van vertalingen van schrijvers als Cervantes, Calderón, Quevedo, Antonio Machado, Unamuno, Borges y Muñoz Molina.
Gezien uw ervaring als docent en auteur van boeken over Spaanse literatuurgeschiedenis, wat zijn voor u de meest interessante aspecten daarin?
A: Wat mijn eigen onderzoek betreft, zou ik de herontdekking van La selva confusa noemen, het vroegst dateerbare toneelstuk van Calderón, dat in een auteurshandschrift bewaard is gebleven maar nooit is uitgegeven. Het ontbreekt in alle uitgaven van zijn toneel. Als u met uw vraag in het algemeen doelt op het belang van literairhistorische studies, zou ik antwoorden dat geen enkel verschijnsel –op sociaal, economisch, politiek of cultureel vlak– werkelijk kan worden doorgrond los van zijn historische ontwikkeling. De Spaanstalige literatuur omvat bovendien een aantal teksten, en zelfs hele genres, die een universele waarde bezitten die boven hun historisch moment uitstijgt. Ik denk daarbij niet alleen aan Don Quichot, maar ook aan La Celestina, de schelmenroman, het toneel van de Gouden Eeuw van Lope de Vega en Calderón, een handvol gedichten van Fray Luis de León, de poëzie van Quevedo en van Góngora…
Wat zijn voor u de uitdagingen geweest om werken van beroemde schrijvers als Cervantes, Quevedo of Machado te vertalen?
A: Ik heb me vooral gewijd aan het vertalen van Calderón. In het geval van Het leven is droom kan ik stellen dat het me tientallen jaren gekost heeft om een voor mij aanvaardbare versie te krijgen. De grootste uitdaging van het vertalen van teksten in dichtvorm is niet eens zozeer het vinden van bruikbare rijmen als wel, ten eerste, rijmen vinden die niet gezocht of geforceerd aandoen, en een resultaat bereiken dat zelf als poëzie bevredigend is; en ten tweede, dat het blijft klinken als de stem van de auteur. Dit laatste brengt met zich mee dat je de kenmerkende stijl, zinswendingen, woordkeus en zelfs het wereldbeeld van de auteur moet bestuderen om er geen verraad aan te plegen. Ik hoop zo voor elkaar te hebben gekregen dat, om maar iets te noemen , mijn Borges-vertalingen niet net zo klinken als mijn Góngora-vertalingen. Maar al met al moet je het anachronisme onderkennen van de pretentie om Quevedo of Calderón in het Nederlands van de 20ste of 21ste eeuw te herschrijven. Met het verstrijken van de eeuwen verandert immers niet alleen de taal, maar ook ons begrippenkader. De manier waarop wij denken, zoals die in de taal tot uitdrukking komt, verandert. Ik worstel hier altijd mee en kom er nooit helemaal uit. Ik stel me steeds zo ongeveer de volgende vraag: “Hoe zou de schrijver dit zeggen, hoe zou hij pakweg dit kwatrijn componeren, als hij zich niet in het Spaans van de 17de eeuw maar in het Nederlands van mijn tijd zou uitdrukken?” Maar uiteraard zou een Góngora die in onze tijd in de polder zou zijn geboren niet schrijven zoals een Cordobees van zijn tijd. Elke schrijver schrijft vanuit zijn eigen ervaringen, die verbonden zijn met zijn tijdperk en tot uitdrukking komen in de specifieke taal van zijn tijd. Vandaar dat in dit soort vertalingen, zoals gezegd, een onontkoombaar anachronisme schuilt.
Wat Machado betreft: dichters zoals hij, of Jorge Manrique, of Fray Luis de León, zijn des te moeilijker te vertalen vanwege de schijnbare eenvoud waarmee ze zich uitdrukken en die in vertaling nauwelijks omzettingen van de woordvolgorde of omslachtige parafrasen verdraagt. In die zin bieden Góngora of Calderón meer vrijheid.
Verder noemt u Cervantes; zijn naam staat goed op mijn vertaalcurriculum, maar het enige wat ik van hem vertaald heb is De poppenkast der wonderen, een tekst geschreven in een stijl waarmee ik, eerlijk gezegd, erg in de knoop heb gezeten. Te veel onderdelen van de tekst deden mij willekeurig aan; alleen al de namen van de personages, die je niet kunt handhaven maar ook niet kunt vertalen. Ik ben dan ook nooit helemaal tevreden geweest met het resultaat.
Naar aanleiding van de lezing van komende donderdag: wat bracht u ertoe om La Fabula de Polifemo y Galatea te vertalen?
A: Één van mijn beweegredenen was heel zelfzuchtig: de gelegenheid hebben om Polyphemus en Galatea grondiger dan ooit te lezen. Maar ik ben het ook eens met Dámaso Alonso dat het in puur formeel opzicht een buitengewoon volmaakt dichtwerk is, en dus een geschenk aan de wereldliteratuur dat het recht moet hebben gedeeld te worden met wie niet genoeg Spaans beheersen om van het origineel te kunnen genieten. Nu ik het vertaald heb vind ik het trouwens nóg beter dan vroeger: naast de octaven van Polyphemus en Galatea doen die van andere dichters me nu een beetje krachteloos aan, alsof er een hoop vulmiddel in zit. Een tekst als deze verdient het, beschikbaar te zijn in vertaling, vind ik, en aangezien wie het beter zouden kunnen het niet doen, heb ik het zelf maar gedaan.
Waarom zou de Nederlandse lezer dit gedicht van Luís de Góngora willen lezen?
A: Om te genieten van mooie literatuur, mag ik hopen. En louter nieuwsgierigheid. Dezelfde redenen, kortom, waarom iemand de Aeneis of de Divina Commedia zou willen lezen. Maar het is eigenlijk niet aan mij om die vraag te beantwoorden; dat moeten de lezers zelf doen. Guus Middag, die voor NRC Handelsblad een recensie van het boek schreef, heeft minder genoten van Polyphemus en Galatea dan van een gedicht tegen het huwelijk dat ook in de bloemlezing staat…
Voor welk publiek is uw lezing bedoeld?
A: Ik geef de lezing in het Nederlands omdat het per slot van rekening gaat om de presentatie van een vertaling in het Nederlands. Ik hoop dat er vertalers op afkomen, want daar ga ik het deels over hebben, maar iedereen is welkom die zin heeft om van mooie poëzie te komen genieten. Dat is het publiek dat ik in gedachten heb gehad bij het voorbereiden van mijn lezing.
El 10 de octubre se celebró en la Universidad de Ámsterdam la octava Conferencia Spinoza, una iniciativa conjunta del Amsterdam School for Cultural Analysis (ASCA) de la UVA, la Consejería cultural de la Embajada de España en la Haya y el Instituto Cervantes de Utrecht. El Centro Virtual Cervantes (CV) publica los textos de las conferencias Spinoza: http://cvc.cervantes.es/literatura/conferencias_spinoza/
La conferencia de este año lleva por título Contra la muerte y ha sido impartida por la escritora y periodista Rosa Montero. El acto fue presentado por el Embajador de España, Exmo Sr.Don Javier Vallaure, quien recordó a los grandes nombres que han impartido desde 2005 esta conferencia de prestigio. Dr. Pablo Valdivia, profesor de literatura de la universidad de Ámsterdam, expuso los elementos más significativos de la obra de Rosa Montero, cuyo último libro se titula La ridícula idea de no volver a verte. Señala el profesor Valdivia en su introducción: “Precisamente, si algo podemos aprender en los libros de Rosa Montero, es que el duelo paradójicamente nos educa en experimentar con mayor plenitud la vida. La pérdida de un ser querido no tiene cura ni con el olvido ni con el tiempo. La muerte de alguien cercano es una sombra que nos acompaña, con la que tenemos que aprender a convivir. La ridícula idea de no volver a verte constituye un buen ejemplo de esta peculiaridad que acabamos de señalar y que está presente en un buen número de novelas de Rosa Montero”.
La conferencia de Rosa Montero, en tono personal e íntimo, es una reflexión sobre la vida y la muerte y el afán de escribir que condiciona la existencia del novelista. El acto de escritura, como todo acto de creación artística, nace de la necesidad de construir una ficción para hacer más soportable la vida, para aprehender el tiempo y la belleza, para buscar respuestas a preguntas sin respuesta. En definitiva, la creación entendida como rebelión contra la muerte. El texto de la conferencia de Rosa Montero pronto se podrá consultar en el CVC.