El Instituto Cervantes utiliza cookies propias y de terceros para facilitar, mejorar y optimizar la experiencia del usuario, por motivos de seguridad, y para conocer sus hábitos de navegación. Recuerde que, al utilizar sus servicios, acepta su aviso legal y su política de cookies.

   

Blog del Instituto Cervantes de Estambul

Biblioteca Álvaro Mutis

La Residencia de Estudiantes

“Inés Sánchez Cruz pestañea y retrocede veintiséis años. El parpadeo de los ojos la lleva al hogar de los buenos recuerdos, con su rastro de migas luminosas. Como en los cuentos de niños perdidos o abandonados en los bosques, que sin embargo sobreviven con el ingenio gracias a que van dejando sus huellas. Las migas de este pasado no se las han comido los pájaros, la amistad que se forjó hace más de dos décadas y media sigue intacta en ese tiempo recordado, aunque en el presente solo hay un triste abismo y una gran decepción. Ella sí sabe diferenciar el tiempo de entonces del de ahora. Por aquella época, Lusoz era su amigo y aún no se había desprendido de su nombre de pila, que es Agapito. Sí, Agapito Lusoz Pescader, la joven promesa que tenía publicado un libro de relatos y coincidía con ella como becario del curso 1993-1994 en la Residencia de Estudiantes.”

El pestañeo de los ojos de Inés Sánchez Cruz, la protagonista de Amigo, el libro de Ana Merino, le hacen rememorar los momentos que vivió como becaria en la Residencia de Estudiantes durante el curso 1993-1994. El libro se abre sobre ese espacio desde el que Inés va a irradiar el relato, desde el que se desplegarán las tres tramas de la novela y que proporcionará al lector el hogar en el que sentarse a disfrutar de esta investigación literaria.

Inés se asoma a ese pasado desde el mismo lugar cuando regresa en 2019, cuando la becaria se ha convertido en profesora universitaria en Milwaukee y acude a Madrid en calidad de poeta invitada: “Se aloja en la Residencia de Estudiantes y, casualmente, la han puesto en la misma habitación que ocupó aquel lejano año que estuvo de becaria y terminó de escribir su tesis española”.

Así que lo mejor es abrir la puerta a la lectura de Amigo desde este edificio, uno de los inmuebles emblemáticos de la cultura del país y por el que pasaron -y siguen pasando- algunas de las principales figuras del mundo artístico y creativo: “el sitio mágico en el que vivieron Lorca, Buñuel y Dalí de jóvenes cuando eran amigos”.

Ana Merino en la Residencia de Estudiantes de Madrid

La Residencia de Estudiantes

Fue el primer centro cultural de España desde su fundación en 1910. Surge como resultado de las ideas renovadoras procedentes de la Institución Libre de Enseñanza, organismo fundado en 1876 por Francisco Giner de los Ríos y que desarrolló un proyecto pedagógico de más de medio siglo (1876-1939) y en el que participaron intelectuales como José Ortega y Gasset, Leopoldo Alas (Clarín), Antonio Machado o Gregorio Marañón, entre otros.

La Residencia de Estudiantes fue una de las experiencias más vivas y fructíferas de creación e intercambio científico y artístico de la Europa de entreguerras. Su propuesta era complementar la enseñanza universitaria mediante la creación de un ambiente intelectual y de convivencia adecuado para los estudiantes. Entre sus objetivos principales estaba el crear un diálogo permanente entre las ciencias y las artes, así como constituirse en uno de los centros de recepción de las vanguardias internacionales. Por la tanto, se convirtió en un centro de difusión de la modernidad en el país, ya que, como ya hemos adelantado, fueron residentes algunas de las figuras más destacadas de la cultura española del siglo XX: el poeta Federico García Lorca, el pintor Salvador Dalí, el cineasta Luis Buñuel o el científico Severo Ochoa. Sus habitaciones acogieron en su sede madrileña en la Colina de los Chopos (calle Pinar) a creadores como Miguel de Unamuno, Alfonso Reyes, Manuel de Falla, Juan Ramón Jiménez, Pedro Salinas o Rafael Alberti, entre muchos otros. La Residencia fue foro de debate y difusión de la vida intelectual de la Europa de entreguerras. Entre los personajes que acudieron a disertar sobre su saber figuran Albert Einstein, Paul Valéry, Marie Curie, Igor Stravinsky, Alexander Calder, Walter Gropius, Henri Bergson o Le Corbusier.

En este enlace podéis ver un vídeo resumen de lo que han sido todos estos años de actividad de esta institución: www.edaddeplata.org/mp4/diaporama.mp4

“Inés regresa a su querida Residencia de Estudiantes un domingo 3 de noviembre de 2019.”

 ¿Cómo es la Residencia que la acoge de nuevo?

Hoy sigue siendo uno de los centros más originales del panorama cultural español. Allí se organizan numerosos actos públicos, en los que los intervinientes son algunas de las principales figuras de las artes y las ciencias de las últimas décadas: Pierre Boulez, Mario Vargas Llosa, Jacques Derrida, Blanca Varela o Massimo Cacciari, entre otros. Entre los actos y actividades que se organizan podemos asistir a: conferencias, mesas redondas, conciertos, lecturas de poemas, encuentros o exposiciones. Este dinamismo ha hecho de la Residencia un espacio abierto al debate, la reflexión crítica y la creación en torno a las últimas tendencias de la época.

(Buena parte de la información sobre la Residencia procede de su propia página: http://www.residencia.csic.es/)

Allí llega Inés para dar un taller de poesía de una semana. “Han pasado muchos años, y esa mañana, mientras pestañea mirando hacia el jardín de las adelfas que un siglo atrás mandó plantar el poeta Juan Ramón Jiménez, Inés…” rememora su pasado y las personas que allí conoció y que tanta influencia tendrían en su vida; recuerda a Agapito Lusoz Pescader y a Sabino Viñuela. Para completar la información sobre la Residencia de Estudiantes os dejamos este enlace donde podéis ver al completo el documental del periodista, historiador y novelista Jorge Martínez Reverte, que realizó con motivo del centenario de su creación: http://www.edaddeplata.org/mp4/centenariox264/cien_documental.mp4

Jorge Martínez Reverte en la presentación del documental en la Residencia de Estudiantes

Jorge Martínez Reverte fue amigo de la Residencia de Estudiantes donde en 2019, dos años antes de fallecer, presentó su libro “Libre te quiero”. En aquella tarde el cantautor Amancio Prada le dedicó dos canciones; una de las letras era: «¿Será posible que vengan / Los amigos y que «era» digan / «Un hombre, y te quiso mucho» / Y «mucho» llorando digas? ». Inés Sánchez encontrará a otro Amigo, pero sus amores y llantos son asunto de otra presentación.

Contadnos las primeras impresiones del libro, ¿qué os está pareciendo? ¿Existen en vuestros países instituciones con la misma filosofía que la Residencia de Estudiantes? Enviadnos vuestros comentarios.

Amigo, de Ana Merino

Abrimos el blog a la cuarta y última lectura de la segunda edición del club virtual 4 Lecturas, 4 Continentes, organizado desde las bibliotecas del Instituto Cervantes de Bruselas, Estambul, Tetuán y Chicago. En esta edición el tema del club es la memoria del siglo XX.

Amigo es la nueva novela de Ana Merino después de alzarse con el Premio Nadal. Una historia que indaga en la fuerza de la amistad y su reverso más doloroso: la traición. Inés Sánchez Cruz, una poeta mexicana afincada como profesora de escritura creativa en Estados Unidos, llega a la Residencia de Estudiantes de Madrid para impartir un taller de poesía e investigar un hallazgo reciente: el archivo familiar de Joaquín Amigo, uno de los amigos de Lorca, también asesinado violentamente y desaparecido al comienzo de la guerra civil. Inés arrastra una profunda angustia fruto aparentemente de las luchas de poder en el ámbito académico y la traición por parte de un amigo íntimo, pero el fallecimiento de uno de sus colegas activa una serie de recuerdos traumáticos que se entremezclan con las investigaciones de los documentos y cartas del archivo familiar. 

Ana Merino (Madrid 1971) es catedrática y fundadora del MFA de Escritura Creativa en Español de la Universidad de Iowa. Ha publicado nueve poemarios, entre los que destaca Preparativos para un viaje, galardonado con el Premio Adonáis de Poesía en 1994, y es autora de obras de teatro estrenadas en Zúrich y Iowa. Experta en estudios culturales, es pionera, con sus ensayos, en el desarrollo de la formación académica del cómic. Ha sido columnista para El País, miembro del Comité Ejecutivo del International Comic Arts Forum (ICAF), del Directivo del Center for Cartoon Studies (CCS) y del Iowa City UNESCO City of Literature. En la actualidad es miembro de la Junta Directiva del Teatro Riverside de Iowa. Fue galardonada con el Premio Nadal 2020 por su primera novela, El mapa de los afectos. Amigo es su segunda novela de ficción.  

El debate sobre Amigo se lleva a cabo del  19 de noviembre al 9 de diciembre en este mismo blog, esperamos vuestros comentarios y opiniones tal como vayáis avanzando en la lectura. El sábado 10 de diciembre tendrá lugar el encuentro con Ana Merino en la plataforma Zoom, con la moderación de Ángel Hernando. Una oportunidad única para dialogar con la escritora y poder comentar detalles de la novela y de su trayectoria literaria.

Encuentro con Santiago Roncagliolo

El pasado sábado 8 de octubre descubrimos un poco más al increíble autor Santiago Roncagliolo, camaleónico como pocos, cuando quiere escapar de la realidad, y humilde y sincero en todo momento. Con él pudimos disfrutar y conocer en profundidad su trayectoria literaria, junto a grandes lectores, colofón de una lectura épica, Abril rojo, tercer libro del club 4 Lecturas 4 Continentes de 2022

Nos contó su llegada a España para formarse en escritura de guion, con la que quería experimentar y escribir otros géneros y así, descubrir y probar diferentes posibilidades. Ese Madrid de los años 90 lo recibió con los brazos abiertos, era el lugar ideal para encontrar artistas, y mucha libertad, en comparación con el Perú de la época, anticuado y machista. Se dejó inspirar por un Madrid auténtico, pegajoso y cañí, que hoy día ha seguido los pasos de Barcelona, modernizándose y dejando de lado la solera y carisma con la que contaba la ciudad hasta hace tan sólo veinte años.

Santiago Roncagliolo durante el club de lectura el pasado sábado 8 de octubre.

Nos descubrió también cómo su literatura se nutre de experiencias, viajes, visitas, gente… lecturas e historias para contar las suyas, y nos hizo recordar la gran frase de Cervantes: «El que lee mucho y anda mucho, ve mucho y sabe mucho». Entre otras anécdotas, sus visitas a la cárcel, el lugar en el que un país guarda todo lo que no quiere ver, le resultaba de especial interés. Y ese conocimiento, todo unido, es el que utiliza para crear sus novelas, donde los personajes se van alejando de la persona en la que se inspira a medida que se va adentrando en la novela. Nos confesaba que nunca creyó que pudiera llegar a ser escritor, durante su juventud, ser escritor significaba viajar y codearse con políticos y gente importante, un sueño demasiado inalcanzable para él. Sin embargo, siendo profesor, se dio cuenta de que eso era lo que realmente le gustaba, y al llegar a España, y unos premios literarios después…, finalista del Premio Herralde con la novela Pudor, que ya era una buena carta de presentación, y el Premio Alfaguara 2006 por Abril rojo, pudo dedicarse por entero a este oficio. Afirma sentirse más tranquilo en los últimos años en la creación literaria que en el periodismo, por el anonimato que el mundo artístico le otorga en comparación con el anterior, donde uno está obligado a posicionarse. 

Santiago proviene de una familia de exiliados, creció en México, junto a otras familias de exiliados políticos de América Latina, entre chilenos y uruguayos, y creció con la sensación de ser de cualquier lugar en el que se hablara español. Perú, su lugar de origen, la dura realidad social y política que lo componía, lo descubrió años después. Al no haber nacido en esa realidad, sí se la cuestionó al conocerla, y eso fue lo que le impulsó a escribir sobre la historia de su país. Su refugio siempre han sido los libros. Como emigrante, tiene la sensación de que algún día quizás el mundo podría dejar de existir tal y como lo conocemos, y eso le impulsa a querer contar realidades, aunque también a salirse de ellas en ocasiones, para evadirse e imaginar ficciones en mundos que ha conocido y le han sorprendido, como es el caso de su novela Tan cerca de la vida. Lo mismo pasa con el título La noche de los alfileres, que una lectora destacó, nada tiene que ver con sus novelas históricas, en este caso se adentra en personajes que conoce bien porque son personajes de su infancia. 

Su novela La pena máxima, precuela de Abril rojo, acaba de ser estrenada en cine y pronto estará en plataformas comerciales. Esta novela, en la que aparece el teniente fiscal Chacaltana en años precedentes, tiene también suspense y fútbol, ingredientes ideales para el lenguaje cinematográfico. Otra obra del autor ambientada también en la investigación periodística es La cuarta espada, donde se relatan los años de guerra entre Sendero Luminoso y el Estado peruano. En esta trilogía se cuentan los momentos más siniestros de la historia reciente de Perú. El autor cree que ninguna otra obra que pueda escribir sobre esta época tendrá tanta repercusión como Abril rojo, utilizado como libro de historia en algunos institutos y universidades.

Este libro es una novela negra, sí, pero también es la historia de Perú, al autor le interesa que tenga, de hecho, varias lecturas, entre ellas el retrato sobre un momento histórico: Sendero Luminoso comienza como una guerrilla de profesores, e ilustra muy bien qué pasa cuando no hay profesores ni libros, y la violencia se hace con el poder. El público destacó precisamente el giro del protagonista a medida que avanza la novela, donde esa violencia va arrastrando a todos. El caso que investiga el fiscal acaba convirtiéndole en otra persona, va enloqueciendo poco a poco, al escritor le gustaba ese giro, lo veía necesario. Nuestro protagonista va perdiendo la inocencia en cada novela, y representa así a todos los espectadores inocentes, especialmente ahora mismo, que cada día asistimos impotentes a las guerras y  crueldades que suceden en el mundo.

Algunos lectores destacaron la intriga y algunas complejidades de la trama, donde el protagonista parece ir detrás de la acción hasta que esta le coge a él, y es ahí donde podemos empezar a atar hilos. De gran interés para contextualizar la obra es el primer post del blog 4 Lecturas 4 Continentes, una introducción a la novela, donde nos adentramos en el Perú de finales del s. XX. Otros lectores destacaron el horror de narrar escenas tan truculentas, a lo que el autor respondía naturalmente: «cuando has crecido con esas escenas, no resulta tan difícil narrarlas». Desde Líbano compartían la respuesta. La ironía y el humor negro fueron también comentados, ¿cuándo deja el lector de reírse? Santiago quería jugar con este parámetro, ¿hasta dónde llega la sensibilidad de cada uno? ¿qué remueve a cada cual? El final también fue discutido, una lectora preguntaba si era necesarios, Santiago lo tenía claro, sí: «en una país de asesinos en serie, todos tienen muertos que esconder». Ahí lo dejamos. 

Para el autor, el reto del libro es que todo el mundo pueda entender la lectura, y esa tarde pudo comprobar cómo se entendía desde cuatro continentes, con esos puntos de vista que él mismo, como autor, también incluye a partir de sus experiencias vitales, y de los diferentes lugares de origen y de acogida que le han visto crecer, y gracias a los cuales ha podido crear esta gran novela. Acabamos, quizás, un poco tristes, Santiago Roncagliolo afirma que actualmente Perú está más dividido que nunca, aún habiendo hecho, en su opinión, todo lo necesario. La población está polarizada en un enfrentamiento abierto entre la izquierda, asociada todavía al terrorismo, y la derecha, al fascismo. Esperamos que leer y conocer la situación pueda contribuir de alguna manera a mejorarla. Acabamos con una frase de aquella tarde: quien compra un libro, compra una identidad. Ahora somos todos un poco más roncagliolos, y estamos encantados.

Desentrañando la novela: “Abril Roncagliolo”

Abril rojo es un título que en su brevedad resume el contenido del relato: hay unos hechos que suceden en un periodo muy concreto, del 9 de marzo del 2000 hasta el domingo 23 de abril. Se inician en carnaval y terminan con el fin de la semana santa, y se tiñen de rojo por los diferentes asesinatos -a estas alturas de la lectura creemos que nos desvelamos nada nuevo- que se van a producir en la ciudad de Ayacucho. Breve, ágil, simbólico y verídico -el autor se refiere a unos acontecimientos que realmente sucedieron.

Hay un ambiente en el que se mezcla lo religioso con lo pagano y que es un buen reflejo cultural y social de la ciudad, allí conviven población indígena, militares, policías, curas y funcionarios, educados en el canon de poder que se irradia desde la capital.

La novela puede dividirse en nueve partes, tal y como analizan Katherine Jazmin Alvarado Huamán y Hugo Jaime Camacllanqui Amancay en su trabajo “La corrupción en la novela Abril rojo de Santiago Rafael Roncagliolo Lohmann» y entre los temas que van apareciendo están la corrupción y la muerte, por supuesto, pero también el asesinato y la violencia, el terrorismo, las obsesiones personales, las mujeres, la semana santa y el papel del turismo.

La Semana Santa en Ayacucho. Foto: ANDINA/Carlos Lezama

El texto se va construyendo a través de los informes del fiscal Chacaltana, los comentarios que él mismo hace de estos escritos, unas notas llenas de incorrecciones que se van intercalando azarosamente, dando una sensación de naturalidad, creando la impresión de que los acontecimientos se cuentan conforme surgen, y la presencia del narrador en tercera persona que va cosiendo todo y añadiendo puntos de vista que tanto el fiscal como el redactor de las notas desconocen. Además, Roncagliolo utiliza el diálogo para poner ante los ojos del lector la profundidad de los personajes.

A modo de ilustración dejemos un fragmento de los informes del fiscal, ya que como se afirma en el taller de lectura de Liliana Costa “son los textos más logrados. Reflejan su lucha interior, su patetismo, su falta de mundo. Y ante el vacío personal y la necesidad acuciante de negar lo que nadie sabe sobre él, desarrolla una actitud defensiva para proteger las normas legales y no perder el norte.” (Abril Rojo – (lilianacosta.com)):

“Según ha manifestado ante las autoridades competentes, el declarante llevaba tres días en el carnaval del referido asentamiento, donde había participado en el baile del pueblo. Debido a esa contingencia, afirma no recordar dónde se hallaba la noche anterior ni ninguna de las dos precedentes, en las que refirió haber libado grandes cantidades de bebidas espirituosas. Esa versión no ha podido ser ratificada por ninguno de los 1.576 vecinos del pueblo, que dan fe de haberse encontrado asimismo en el referido estado etílico durante las anteriores 72 horas con ocasión de dicha festividad” (Abril rojo)

El carnaval de Ayacucho.

Los personajes de la novela

Roncagliolo presenta a los personajes de manera breve y precisa. Así tenemos a:

1. Félix Chacaltana Saldívar fiscal distrital adjunto. Meticuloso y disciplinado. Hombre débil y carente de personalidad que ha sido destinado a Ayacucho, su ciudad natal, después de haberse divorciado.

2. Edith Ayala Munguía, mesera del restaurante El Huamanguino de origen campesino, muchacha de unos veinte años, bonita, delgada, era tímida, usaba prendas sencillas.

3. Sebastián Quiroz Mendoza, párroco de la iglesia Corazón de Cristo, tenía aproximadamente 50 años, poco pelo y de estatura alta. Félix acudía a él para contarle sobre los distintos asesinatos que se habían suscitado, el padre daba un significado de todos ellos según la religión, las costumbres y los mitos de los Andes.

4. Justino Mayta Carazo, campesino de talla pequeña, quechuahablante. Un hombre que provenía de una familia humilde vivía en Quinua con su madre. Tenía trabajos eventuales y era militante de Sendero al igual que su hermano Edwin.

5. Faustino Posadas, médico legista trabaja en el hospital de Huamanga, tenía acento norteño. Hombre de baja estatura y usaba lentes. Todos los cadáveres encontrados estaban a su cargo, él tenía que hacer la necropsia y presentar el respectivo informe.

6. El Capitán Pacheco estaba a cargo de la comisaría de la provincia de Huamanga y por ende tenía que elaborar los respectivos informes sobre los cadáveres encontrados.

7. El Comandante Alejandro Carrión Villanueva quien tenía poder debido al cargo que desempeñaba (se ocupaba de los ascensos).

8. El Sargento que trabaja en la oficina del capitán Pacheco y es quien recibe al fiscal en todas las visitas que éste.

9. Juez Briceño, hombre bajito que trabajaba en la Corte Superior de Justicia de Ayacucho.

10. Carlos Martín Eléspuru, agente del Servicio Nacional de Inteligencia siempre usaba una corbata celeste y es quien redacta el último informe.

11. Teniente Aramayo estaba a cargo de la comisaría de Yawarmayo, tenía aproximadamente 50 años.

12. Johnatan Cahuide Alosilla, jefe de la Oficina Nacional de Procesos Electorales en Yawarmayo.

13. Hernán Durango González, alias camarada Alonso reo que purgaba condena en el penal de máxima seguridad de Huamanga acusado de terrorismo. Era delgado, moreno.

14. Coronel Olazábal trabajaba en el penal de máxima seguridad de Huamanga, era alto, blanco y joven.

El protagonista y sus vicisitudes

Chacaltana es un perdedor, aunque intenta demostrar a todo el mundo que no es un tonto. Entres sus peculiaridades está que habla con su madre muerta y la trata como si estuviera viva. Está solo, no tiene amigos y parece que tampoco muchas relaciones sociales.

“Conforme el ágape transcurría y el alcohol circulaba, el tema iba limitándose a enumerar a las mujeres que cada uno deseaba y a los detalles de un hipotético encuentro sexual. Y el fiscal distrital adjunto Félix Chacaltana Saldívar, de momento, no deseaba desear a ninguna mujer. Solía asistir a las enumeraciones asintiendo y preguntándose en qué momento podría decir algo, una palabra al menos, tratando de recordar a alguna mujer que llamase su atención. Por eso, normalmente, prefería no asistir, quedarse en casa arreglando el cuarto de su madre o leyendo a solas sus poemas de José Santos Chocano.” (Abril rojo)

Chacaltana en la película La pena máxima

Es un hombre inseguro, casi paranoico, se siente perseguido, observado, tiene pesadillas, sueña con fuego y con golpes, los fantasmas del pasado se le van apareciendo.

Liliana Costa, en su taller de lectura nos dice que: “A pesar de todos sus defectos, Chacaltana es el hilo conductor. La novela se sostiene porque él quiere seguir investigando. La energía que él centra en su trabajo, para huir de sí mismo, inunda de energía a la narración.”

¿Cómo es el estilo?

Liliana Costa hace un análisis muy preciso y clarificador: <<Predominan las frases cortas, dinámicas, directas. La brevedad de la frase aligera la narración. Acelera el ritmo.

Hay ocasiones en que la frase tiene una sola palabra, en este caso suele ser un verbo: “Succionó”.  “Embistió”.  “Sudaba” .

En muchos párrafos Roncagliolo inicia las frases con un verbo, sobre todo cuando narra escenas de máxima tensión. El recurso funciona muy bien, lo que interesa en ese momento es lo que hace el personaje para salir del apuro. Centrar la atención en el verbo es altamente eficaz:

“Volvió a oír el siseo afuera, en el salón. Casi por instinto, desabrochó la cartuchera y sacó el arma. Regresó a la sala apuntando hacia delante, hacia las cajas. Rastrilló, para que la bala saliese más rápido en caso de emergencia. Se dio cuenta de que su mano temblaba. Apoyó la espalda contra la pared y empezó a recorrer así el perímetro de la habitación, bordeando las cajas donde las había. Sacó su pañuelo para secarse el sudor. […]

Los verbos acentúan la acción, y al cargarse la escena de acción, aumenta el suspenso y la tensión dramática.

Otro acierto estilístico son las frases en donde se unen elementos inesperados:

-“Félix Chacaltana Saldívar recuperó su carnet y su sueño”.

-“Sólo volvió a meter la cabeza en su ventana y en su vida”.

-“Su vulva sabía a jabón y a ella”.

Y para terminar, queremos mencionar el humor, como nota constante en la novela. Este humor negro que hace risueña una historia tremenda, cruel, dolorosa y demencial.

El humor como ingrediente importante de la vida humana:

“-¿Refuerzos? Claro. También pedimos una piscina y un par de putas y aquí estamos”.

“Gringos pues, fiscal, son unos maricones todos. Chillan y chillan y no les han hecho nada. Ni siquiera llegaron a robarles porque se pusieron todos a gritar. Deberíamos exportarles delincuentes para que sepan lo que es un robo de verdad y no nos hagan perder el tiempo en cojudeces.” >> (Abril Rojo – (lilianacosta.com)

Ya estamos impacientes de conocer y charlar con Santiago Roncagliolo y de compartir con él nuestra lectura. Es el próximo sábado 8. ¡No os lo perdáis!

La interpretación de la violencia en «Abril rojo»

Los acontecimientos que se narran son los siguientes: el funcionario Félix Chacaltana Saldívar investiga un crimen sucedido en Ayacucho, en el interior del Perú, región conocida por ser origen del grupo terrorista Sendero Luminoso. El contexto en el que tiene lugar es heredero de la violencia generada en el país por el propio terrorismo y la violenta represión ejercida por las Fuerzas Armadas peruanas. La acción transcurre en el año 2000.

Getty Images

A lo largo de las diferentes entradas de este blog hemos conocido el contexto de violencia en el que se inscribe la novela pero, ¿cómo ha sido recibida la narración de Roncagliolo? Para algunos, los personajes del libro no son muy creíbles y no dejan vislumbrar una ideología muy concreta, sin embargo, para otros representa con bastante fidelidad el clima de terror que existió entre 1980-2000 dentro del marco de la novela negra.

¿Y qué opina el autor?

«Toda novela es un intento de darle sentido al mundo, o a un mundo […] Quizá con esta novela trataba de darle sentido precisamente a lo más difícil: al horror, a lo que queda más allá de lo explicable».

  • Pero, señor Roncagliolo: ¿por qué piensa usted que existió esta violencia?
  • «Creo que la violencia se debe a la desigualdad y a que el Estado no llega a todos. La única solución posible es un contrato social más justo pero democrático […]; no es posible explicar todo lo que hizo Sendero sin admitir que tuvo apoyo de la población. Cuatro fanáticos con un revólver no ponen en jaque al Estado durante doce años como ellos hicieron».
  • ¿Y por qué piensa que la población les apoyó?
  • “el apoyo que tuvo Sendero venía de gente harta de ver que los políticos cobraban mucho y hacían poco más que pelearse entre ellos”.

(Entrevista ficcionada a partir de las respuestas del autor en este artículo del diario El País: https://elpais.com/diario/2006/04/06/cultura/1144274406_850215.html)

Télam digital 16072021

Para Lucero de Vivanco (Postapocalipsis en los Andes. Violencia política y representación en la literatura peruana reciente, a08.pdf (uc.cl)), la violencia del pasado se articula en esta novela  en torno a la escritura y el cuerpo: “el fiscal Chacaltana acompaña sistemáticamente su trabajo con la elaboración de oficios redactados con minuciosidad obsesiva”. Frente a este lenguaje perfecto del fiscal van apareciendo otros escritos menos cuidados que nos hacen reconocer “la violencia pasada y presente, así como la necesidad de entenderla y formularla en la escritura”.

Por otro lado, según De Vivanco está el cuerpo como alegoría de la violencia en el Perú. En el relato van apareciendo víctimas diferentes, arquetipos de sectores significativos de las sociedad. “A cada uno de esos cadáveres se le ha mutilado una extremidad para formar con ellas un nuevo cuerpo”. Todo parece formar parte de un ritual de redención y renovación, aunque según Lucero de Vivanco en Abril rojo el cuerpo “expresa no solo la violencia ejercida, sino también el lugar autoritario desde donde esta se impartió y desde donde, históricamente, se ha combatido todo intento de resistir el poder.”.

Esta representación específica de la violencia contra el cuerpo humano en la novela hay que entenderla dentro de un relato mítico peruano, el mito de Inkarrí: “ Inkarrí no es sólo una compleja metáfora que expresa la sensación de orfandad de un pueblo a la espera del retorno de su líder y el restablecimiento del orden perdido, es también la personificación de la resistencia.” (Elicenia Ramírez Vásquez: “El mito de Inkarrí:  ideología y violencia en las novelas La tumba del relámpago de Manuel Scorza y Abril rojo de Santiago Roncagliolo» (mito de inkarri.pdf (univalle.edu.co)):

Según Rita Mariela Pezo Miranda, “La figura del cuerpo descuartizado como símbolo del cuerpo colectivo usada por el narrador de Abril rojo, podría ser una metáfora de la población ayacuchana” (Microsoft Word – Tesis Abril Rojo.docx (uio.no)), y la autora cita el siguiente pasaje de la novela:

“Comprendió entonces que eran los muertos quienes le vendían los periódicos, quienes conducían el transporte público, quienes fabricaban la artesanía, quienes le servían de comer. No había más habitantes que ellos en Ayacucho, incluso quienes venían de fuera morían. Sólo que eran tantos muertos que ya ninguno era capaz de reconocerse” (Abril rojo)

En medio de este caos, el fiscal Chacaltana, en su búsqueda de la transparencia y la verdad, no entiende su posición en los acontecimientos hasta que todo es descubierto, lo que para él supondrá una transvaloración personal y profesional.

El fiscal Chacaltana en la película La pena máxima

Quedémonos para cerrar esta entrada con las palabras de Santiago Roncagliolo en la presentación en el Perú de la nueva edición de la novela en la editorial Seix Barral:   “No sé si esta novela se podría escribir ahora en Perú. Ya hay gente que rompe los afiches en las librerías porque sale la hoz y el martillo en la reedición de Abril rojo. Contar historias es un oficio muy peligroso en el Perú.”

¿Qué pensáis? ¿Consideráis que Abril rojo  sigue siendo una novela de actualidad?

  • Twitter
  • Facebook
  • RSS

Biblioteca Álvaro Mutis / Álvaro Mutis Kütüphanesi

Logotipo del Instituto Cervantes

Dirección / Adres:
Tarlabaşı Bulvarı, Zambak Sok 25
34435 Taksim/İstanbul

Horario
Martes-miércoles-jueves, de 11.30 a 14.00 y de 15.00 a 19.15;
Viernes, de 11.30 a 14.00 y de 15.00 a 17.00 Sábados, de 11.30 a 13.00 y de 13.30 a 17.00
Domingos y lunes, cerrado

Çalışma Saatleri
Salı, Çarşamba, Perşembe ve Cuma: 11:30-14:00 ve 15:00-19:15.
Cumartesi: iki haftada bir Cumartesi gün hizmete açıktır: 11:30-13:00 ve 13:30-17:30.

Persona de contacto / İrtibat Kişisi
Francisca Segura.

https://estambul.cervantes.es

bibest@cervantes.es

Red de bibliotecas del IC en la web social

  • Blogs de la Red de Bibliotecas del Instituto Cervantes
  • Facebook de la Red de Bibliotecas del Instituto Cervantes
  • Twitter
  • Instagram de la Red de Bibliotecas del Instituto Cervantes
  • Canal YouTube de la Red de Bibliotecas del Instituto Cervantes
  • Página de Pinterest de la RBIC

Calendario / Takvim

abril 2024
L M X J V S D
1234567
891011121314
15161718192021
22232425262728
2930  
© Instituto Cervantes 1997-2024. Reservados todos los derechos.